sábado, 28 de enero de 2012

"El Compañero de la Noche" ~ (Escrito por: Arlequín)





3:00 A.m, Otra vez la misma hora. El mismo sueño. Pero ya estoy bien, él me cuida desde la esquina de mi habitación. ¿Volver a mi descanso? jajaja, imposible. De vuelta a la rutina de siempre: se prende la pc, el televisor para sentirse acompañado, se toman esas amigas mágicas para tranquilizar el pecho y se vuelve a un mundo donde los ruidos no lastiman, es costumbre esperar la llegada del sol como fuente segura de que ellos ya están lejos. Aunque sea solo una idea rara que saque algún día.

Toda esta historia parece un montón de rutinas sin sentido de alguien que esta loco. Pero resulta que es uno de los caminos de la peor locura que cometí algún día. De echo, es el resultado final de mi estúpida idea de querer entender mas de lo que necesito y de mostrarme, incluso a mi mismo, que el miedo es algo meramente psicológico por lo que seria simple de anular.


Las primeras veces fueron un juego, con gente que no entendía mucho del tema y con una pregunta que no pensaba descubrir hasta que algo diera fuertes señales de que esto era real. Que no era un cuento para que los nenes se tomen la sopa.


A medida que el tiempo pasaba iba entrando mas al tema y me relacionaba con gente cada vez mas afianzada en el asunto. Con mas años en el tema y con mas secretos que guardar. Las historias eran un secreto de cripta en estos lugares y las amenazas y ritos que se celebraban eran cada vez mas inhumanos y desquiciados.



Pero para alguien que no tiene mucho que perder esto no es un impedimento. Todo lo contrario, lo hace mas interesante y divertido.
Un juego al que jamas se debe entrar es al de la experiencia. Si te dicen "¿Estas listo?" y no lo estas no mientas, es un consejo que no solo sirve en estos temas, de echo es un consejo para la vida, es la diferencia entre Bien hecho -mal echo, vivo-muerto.

Lo importante es que del otro lado del umbral las criaturas estas por lo visto mas sedientas de la inocencia del que cree que se las sabe todas. Y así es como una persona se destroza la psiquis.


El ritual estaba por dar comienzo. Situaciones asquerosas previas y la llegada del bendito bicho ese. "Agacha la cabeza", sentí un pequeño tirón en la nuca y el resto fueron imágenes totalmente desquiciadas. Dolores en el pecho como si me estuviesen sacando algo de adentro, algo muy grande. Mis ojos se perdían en imágenes que por poco me hacían llorar. Y mis oídos estaban centrados en la voz de Guillermo que no paraba de pronunciar cosas sin sentido y de repente... la nada misma.


Me desperté en mi cama, sin saber como llegue ahí. La almohada con muchísima sangre que por lo visto provenía de mi nariz y en mi mesa de luz un papel. "Mentiste. Lo siento por vos. Ya no hay nada que podamos hacer"


Intente comunicarme con Guillermo. Juro que todos los intentos fueron en vano, es como si se lo hubiese tragado la tierra. ¿Los demás? Todos fantasmas. Jamas existieron por lo visto ningún numero,ninguna dirección. Me sentía en otro mundo. De echo, no fue hasta la noche siguiente que lo entendí.


Me acosté temprano. El echo me tenia confuso y debo admitir algo asustado. Exactamente a las tres de la mañana se dieron dos o tres golpes fuertes en la ventana como si alguien la quisiera arrancar. Me desperté exaltado. Esperando ver a Guillermo del otro lado, pero nada, ni siquiera un indicio de esos golpes. De repente el crujido de las patas de mi cama arrastrándose. "Estoy solo", pensé y corrí hacia el interruptor de la luz. Lo presione un tanto desesperado y resulto en la explosión del foco, pocas veces en mi vida había estado tan asustado. Intente abrir la puerta con todas mis fuerzas. Fue en vano. Incluso intente romperla pero parecía mas dura de lo que recuerdo es la madera.


Y ahí estaba solo en la oscuridad. Con un terror que me inundaba y hacia correr sudor frió por mis manos. Mis ojos ya adaptados a la oscuridad me dejaron ver movimiento. Pero... ¿De donde? En el techo. Situación que no ayudo para nada a mi estado, me pare y puse mi espalda contra la puerta como si fuese a recibir un ataque...



Y lo vi... Era un arlequín, como esos que ves en los circos medievales, esos divertidos personajes que alegran a los nobles. 






Pero estaba posado en el techo desafiando la gravedad y tenia un par de particularidades. Su color blanco con detalles que la oscuridad no me dejaba apreciar y esa sonrisa, juro que la sonrisa mas perturbadora que vi en mi vida, acompañada por esa mirada fija y amenazadora...


Es raro ver como puede reaccionar una persona ante el miedo. A veces te paraliza, otras veces te hace correr tan rápido que parece que vas a volar. Esta vez me hizo atacar sin pensarlo. A lo que el arlequín salto a la otra punta del techo y torció su cuello para posar su mirada sobre mi de nuevo. Me senté resignado sentía que en cualquier momento se iba a lanzar sobre mi, pero solo podía mirarlo...

Me quede mirándolo fijamente. casi llorando como pidiéndole por favor que no me haga nada. 




En un momento me di cuenta que ya no me miraba a miasí que mire... desearía no haberlo echo. Pero ahí estaba de espalda a mi y de cara al ángulo de la pared, era una criatura de otro mundo, supongo pues nada humano ni animal puede ser así. Pelo largo y en pequeña cantidad, se le podía ver el cuero cabelludo y era totalmente esquelético, brazos largos que casi tocaban el suelo y piernas a la medida del hueso con unos pies extremadamente grandes con unías que parecían garras, respiraba agitado pero en silencio.


Me quede paralizado mirando esa bestia infernal. En un momento se dio vuelta y pude ver que no tenia labios. Tenia la mandíbula expuesta y sangrando. Los dientes estaban destrozados y rojos por la sangre.

Levanto uno de los brazos y señalo mi pecho, comenzó a caminar hacia mi..Yo estaba paralizado. El arlequín se alboroto de manera extraña y empezó a saltar sobre los ángulos del techo emitiendo un sonido que era casi un llanto. Esta criatura tomo mi brazo y comenzó a olfatearme con una nariz casi inexistente. Yo estaba realmente aterrado pero no podía mover ni un músculo. Sentí un chillido, no pude cerrar los ojos y pude ver como enterraba dos de sus garras en mi brazo mientras acercaba esa boca a mi cuello. De repente el llanto del arlequín se convirtió en un grito y salto hacia esa criatura. Se fundieron y dejaron un charco de una sustancia asquerosa que me baño de pies a cabeza.


Comencé a moverme,sentía un dolor terrible en el brazo y podía también sentir las lágrimas callendo de mis ojos. No se si era alegría por seguir vivo o la desesperación de saber que en algún momento esa cosa vendría por mi. Rompí en llanto, pasaron unos segundos y sentí como se abría la puerta de mi habitación. Corrí al living, eran las 6 am... Fueron las tres horas mas largas de mi vida...


Me bañe, aun en shock, limpie esa "baba" y deje una ofrenda a ese arlequín. No se si me cuida o esta esperando el momento preciso para recuperar lo que es suyo...

Mi alma.


Lo importante es que aleja esas criaturas que periódicamente me visitan buscando quitar el cartel de vacante que yo mismo puse en mi frente por una idiotez del momento.


No puedo hablar con ningún psicólogo, quien creería esta historia después de todo duermo poco, me auto-medico, me dedico al alcohol y otras sustancias. Solamente puedo pedir perdón, dejar mi enseñanza y esperar que el día que logren hacer su trabajo no sea demasiado doloroso. 



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Basado en un historia real que le sucedió al escritor de varios textos que ustedes ya leyeron, Arlequín. Con este relato ya sabrán el porque usa ese apodo.


Una historia que nos demuestra que hay muchas cosas con las cuales no conviene jugar.




Fuentes:
Imagen1 (Habitación): Funky64 (www.lucarossato.com) via photopin cc
Imagen2 (Arlequín): mel!nka via photopin cc
Texto escrito por ARLEQUÍN

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